Consultores de negocios
Como es de todos conocido en Colombia se hace una reforma tributaria cada 22 meses desde el año 1991 habiendo al menos 14 reformas importantes en estos 28 años.
Es así como la reforma tributaria estructural (Ley 1819 de 2016) efectuó cambios importantes en el Estatuto Tributario Nacional, y luego la reciente Ley de financiamiento (Ley 1943 de 2018) introduce nuevamente cambios pensados en principio para incrementar el recaudo fiscal en el país.
Para aclarar y efectuar lineamientos de interpretación a las reformas mencionadas, se crean los decretos reglamentarios de Ley de financiamiento (579,872,873,874 de mayo de 2019) y se modifican también algunos aspectos del Decreto único tributario (2517 de 2016), y por último, se introducen nuevas modificaciones a la Ley de financiamiento en el impuesto de Renta e IVA , pero ya mediante el Plan Nacional de Desarrollo (2018-2022) promulgado por el gobierno nacional.
Estos permanentes cambios de legislación, nos lleva a evaluar cada día ese galimatías normativo, sumado a que en términos generales tenemos una complejidad enorme en la lectura e interpretación de las leyes con la existencia de múltiples gravámenes y de impuestos transitorios que se convierten en permanentes.
Esa incertidumbre jurídica en la que vivimos conllevan a que lograr una buena planeación tributaria sea un reto y un desafío cada vez más complejo, técnico e interdiciplinario, generándose la necesidad de requerir de consultores de negocios de diferentes áreas del conocimiento.
Es aquí donde surge la figura de los consultores de negocios en esta materia, como asesores integrales en materia jurídica, contable e incluso en procesos empresariales e industriales, que desde su experticia en función de los negocios puedan dar soluciones efectivas frente el entorno que integran en las relaciones de los clientes con relación a la normatividad tributaria y sus alcances, incursionado incluso en temas propios del core de negocio, consultoría y teorías organizacionales.
No podemos pretender crear formulas mágicas para definir las estrategias de una buena planeación tributaria, pero lo que si es necesario, es que tanto los ciudadanos contribuyentes como las organizaciones en general, cuenten con la asesoría de consultores de negocios, los cuales deben ser capaces de detectar problemas que afecten la tributación en las empresas, identificando las debilidades en las diferentes áreas del negocio que puedan afectar el costo de los inventarios, productos terminados, servicios, beneficiario real, etc, descubriendo nuevas oportunidades que aporten en el crecimiento de la empresa desde los beneficios fiscales.
En Colombia, se debe estar preparado estructuralmente para enfrentar todo ese cambio normativo creado por las leyes y decretos antes mencionados, estudiando cada caso en concreto y creando una base técnica para mantenerse actualizado y poder edificar una serie de acciones tendientes a la optimización del pago de los impuestos, hacer uso de los beneficios fiscales y tratar de minimizar efectos negativos de las cambiantes normas administrando el riesgo tributario.
¿Qué se requiere encontrar para una buena consultoría contable, fiscal y jurídica con tanto cambio normativo?
- Disponibilidad: Tener un consultor disponible, cuyos plazos de atención y tramitación sean lo suficientemente rápidos o incluso para los servicios extra que se requieran.
- Experiencia: Se debe contar con consultores de negocios que hayan podido enfrentarse a muchas situaciones con sus clientes de los cuales se puede aprender de los errores de otras empresas , minimizando el riesgo de cometer algún error que pueda resultar muy costoso para la empresa.
- Análisis Integral: los profesionales deben tener una visión integral del negocio contando con las herramientas y experticia para establecer las implicaciones que se puedan reflejar al tomar decisiones contables, financieras, fiscales y jurídicas entrelazadas entre si, que puedan afectar a la empresa.
- Agilización en tramites: Se disponga del mejor servicio online, así como la experticia en la tramitología de la documentación con las entidades del estado.
- Proactividad: Se requiere que los consultores de negocios estén a la vanguardia de todos los cambios que están ocurriendo en la legislación, para lo cual deben disponer de plataformas tecnológicas e investigativas que permitan anticipar las afectaciones o las oportunidades que puedan afectar a las empresas.
- Transparente: Es fundamental ser claro en los momentos en los que no se pueda cumplir con las expectativas de los clientes, desde la óptica ética y legal.
Lo que deben buscar los consultores de negocios, es lograr un nivel de tributación adecuado, justo, sin riesgos, medido con base en la tarifa efectiva de tributación perfectamente medible y cuantificable, aplicando todo lo que la legislación ofrece en términos de beneficios que se deben maximizar a favor de los contribuyentes.
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